Serían sobre las 2 de la tarde, y sobre la nevera había una nota escrita con el bolígrafo de tinta azul, y sobre el que se leía a duras penas un...
Recuerdo también escuchar una música procedente del sótano, donde estaba mi padre bebiendo cervezas y sentado en el sofá, dejando caer un fino reguero de lágrimas sobre sus mejillas carnosas. Acto seguido a entrar en el sótano se limpió la cara con un pañuelo húmedo que más que quitarle las lágrimas del rostro lo que hizo fue empaparlo nuevamente...
Lo único que me dijo fue un...
No me toques, no me mires,
o te estampo contra el muro,
no soporto a las mujeres
de cerebro casi nulo.
Esta vez no terminamos
con murmullos en la cama,
ni en la ofensa, ni en la angustia
de un orgasmo con desgana.
No, y cuando digo no, es...
Si, es verdad, te la he pegado
y con tu mejor amiga,
pero tu ya te has vengado
con aquel maldito idiota.
Es verdad que estamos hartos,
damos vueltas de peonza,
en las noches de pastillas
para adormecerse al alba.
No, que no, a todo esto digo no,
y no, a toda costa digo no.
Quererse mal es morirse de amor,
es mirarse al espejo en un cuarto por horas.
Quererse mal es un mal sueno obsceno,
el grito final, es la orgía sin freno,
es una guadaña que todo lo arrasa ante ti, así...
Y a todo esto digo no,
y no, y a toda costa digo no.
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